El pulido de pisos es un proceso que renueva y embellece superficies como mármol, granito, terrazo y concreto, eliminando imperfecciones y restaurando su brillo natural mediante el uso de maquinaria especializada, discos abrasivos diamantados, y compuestos químicos. Las empresas especializadas se encargan de la limpieza, el desbaste, la aplicación de densificadores y abrillantadores para lograr un acabado duradero y de alta calidad, mejorando la apariencia y extendiendo la vida útil del suelo.


Es una técnica de acabado superficial que: